Hay quienes afirman que un cristiano puede perder su salvación, porque han visto como algunos que ayer profesaban la fe, hoy no permanecen en ella1. Pero, ¿qué dice la Palabra de Dios acerca de esto? Según la Palabra de Dios, un cristiano verdadero no puede perder la salvación. Son muchos los pasajes bíblicos que enseñan esta maravillosa verdad, veamos algunos de ellos:
Mateo 24:13 dice: “Pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo”. Este verso no debe interpretarse como que con la perseverancia se compra la salvación; no, «por gracia habéis sido salvados». Más bien, el fruto de aquel que es salvo es la perseverancia. Como dijo el escritor de Hebreos: “nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para la preservación del alma” (10:39).
En Juan 6:38 Jesús dijo que Él ha venido para hacer la voluntad de Aquel que lo envió (Su Padre celestial). ¿Cuál es esa voluntad? Jesús responde en el siguiente versículo: “que de todo lo que El me ha dado yo no pierda nada, sino que lo resucite en el día final” (v. 39). Él no perdió a ninguno en aquel entonces, ya que dijo en Juan 17:12: “Cuando estaba con ellos, los guardaba en tu nombre, el nombre que me diste; y los guardé y ninguno se perdió, excepto el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliera”; y, sin duda alguna, no perderá a ninguno de aquellos que el Padre le ha dado (Jn. 17:20).
Juan 10:27-29: “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen; y yo les doy vida eterna y jamás perecerán, y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano del Padre”. Aquí Jesús dijo claramente que Él es quien da vida eterna a Sus ovejas y éstas jamás perecerán. También dijo claramente que ninguna persona arrebatará a Sus ovejas de Su mano ni de la mano omnipotente de Su Padre. “Bien, ninguna persona las arrebatará de Su mano; pero qué de cosas o ciertas circunstancias” –alguien puede argumentar. Pablo (inspirado por Dios) da respuesta a esto en Romanos 8:35,38,39: “¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?… Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro”. Nadie ni nada podrá separarnos de Dios. Subamos un poco en este mismo capítulo, Romanos 8:29,30: “Porque a los que de antemano conoció, también los predestinó a ser hechos conforme a la imagen de su Hijo, para que El sea el primogénito entre muchos hermanos; y a los que predestinó, a ésos también llamó; y a los que llamó, a ésos también justificó; y a los que justificó, a ésos también glorificó”. Nótese aquí que la salvación es por gracia y totalmente segura de principio (conocimiento de antemano) a fin (glorificación). A todos aquellos que Dios antes conoció, a ésos mismos glorificará –ninguno se quedará a mitad de camino (véase también aquellos versículos que aseguran que Dios santificará por completo a los suyos: 1 Co. 1:8; Flp. 1:6; 1 Ts. 5:23,24).
Inicié diciendo que la perseverancia es un fruto del cristiano verdadero; termino diciendo lo mismo, pero ahora cito a 1 Juan 2:19: “Salieron de nosotros, pero en realidad no eran de nosotros, porque si hubieran sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron, a fin de que se manifestara que no todos son de nosotros”.
Hermano mío, unámonos a la bendición final de Judas (no el Iscariote): “Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída y para presentaros sin mancha en presencia de su gloria con gran alegría, al único Dios nuestro Salvador, por medio de Jesucristo nuestro Señor, sea gloria, majestad, dominio y autoridad, antes de todo tiempo, y ahora y por todos los siglos. Amén” (vv. 24,25).
1 ¿Qué de aquellos que profesan ser cristianos, pero se apartan? Si son verdaderos cristianos, volverán con arrepentimiento y fe; si no vuelven, es evidencia de que ellos nunca fueron cristianos verdaderos (Mt. 7:22,23).
Gloria y alabanza sean dadas a nuestro Dios por tu vida. Que el mismo Dios de paz continue santifican2 y renovan2 tu vida hasta llegar a ser como el varon perfecto creado segun el Padre…y guarde tu vida hasta su venida. Ademas, siga proveyen2 sabiduria celestial para k continues llevan2 su Palabra a traves de este medio virtual.En el nombre de Jesus…Amennnnn