Piper sobre “10 exhortaciones para comunicar el evangelio”.

I. Sabe esto: Dios usa vasos de barro

2 Corintios 4:7 dice: “Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la extraordinaria grandeza del poder sea de Dios y no de nosotros”. ¿Cuál tesoro? El “conocimiento de la gloria de Dios en el rostro de Cristo” (2 Co. 6). “Vasos de barro” es una referencia a nosotros. Nosotros no somos oro. El evangelio es oro. Nosotros no somos plata. Las noticias de Cristo son plata. Nosotros no somos bronce. El poder de Cristo es bronce.

Eso significa que si te sientes promedio o por debajo del promedio en tu sentido de aptitud para predicar el evangelio, eres la persona que Dios está buscando.

II. Consigue recursos que compartir

Regalar buena literatura cristiana es una forma de extender tu testimonio personal del evangelio. Pon algo en tu bolsillo, en tu bolso, en tu maletín, en tu carro. Y ora todos los días: “Señor, hazme un instrumento de difusión del evangelio hoy”.

III. Sabe que Dios puede utilizar muchas influencias

Ten en cuenta que lo que tú le dices a alguien acerca de Jesús puede ser complementado por media docena de otros testimonios que Dios está providencialmente alineando para ser compartidos con esta persona mientras Dios la persigue para salvación. Puedes sentir que tu palabra fue en vano. Pero nunca es en vano (1 Co. 15:58). Tu palabra puede ser el comienzo de las influencias. O puede ser la palabra final y decisiva que Dios usa para traer una persona a la fe. Habla. La palabra más pequeña sobre Cristo no es en vano.

IV. Sé un dador pródigo

Sé conocido como una persona generosa, no como una persona tacaña (Lucas 6:35). Me refiero a esto en general sobre todo lo que posees. La gente tacaña hace que Jesús se vea sin importancia e insatisfactorio. Pero más específicamente quiero decir: sé pródigo en dar buenos libros, si conoces a no creyentes que son lectores. Y, por supuesto, regala la Biblia.

V. Considera a las personas como importantes

Anímate con el simple hecho de que encontrar personas interesantes y ser afectuoso es un hermoso camino hacia su corazón. El evangelismo obtiene una mala reputación cuando no estamos realmente interesados en las personas y no pareces preocuparte por ellos. La gente es realmente interesante. Cada persona con la que hablas es una asombrosa creación de Dios con miles de experiencias interesantes.

VI. Invita personas a la iglesia

Invita a la gente a la iglesia incluso antes de que sean cristianas. Parte de la extrañeza de lo que significa ser cristiano puede ser superado por una creciente familiaridad con cómo cantamos, hablamos y nos relacionamos en la iglesia. Y la predicación de la Palabra de Dios tiene un poder único. La predicación es diseñada por Dios para ser especialmente eficaz (1 Corintios 1:21). Y si las personas dudan en venir a la iglesia, invítalos a un sitio web donde puedan ver o escuchar a tu pastor o algún otro maestro.

VII. Llena la ciudad con enseñanza evangélica

Cuando los apóstoles fueron llevados a juicio en Jerusalén, el sumo sacerdote dijo: “han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas” (Hechos 5:28). Si todos los cristianos hablaran de Cristo, repartieran literatura acerca de Cristo, enviaran correos electrónicos acerca de Cristo, invitaran personas a la iglesia para Cristo, y fueran pródigamente generosos con otros por Cristo, entonces alguien podría decir: “Esos cristianos han llenado la ciudad con su enseñanza”.

VIII. Usa tus dones

Todos tenemos dones diferentes y no debemos intentar imitar todo de alguien. Todo cristiano debe ser un siervo (Gálatas 5:13), pero algunos tienen el don de servicio (Romanos 12:7). Todo cristiano debe tener un corazón misericordioso (Lucas 6:36), pero algunos tienen el don de la misericordia (Romanos 12:8). Todo cristiano debe hablar a otros acerca de Cristo (1 Pedro 2:9), pero algunos tienen el don de profecía, exhortación y enseñanza (Romanos 12:7).

Encuentra dónde encajas y aviva las llamas de tu eficacia allí. Crece en cada área, pero no te paralices porque no eres como otra persona.

IX. Lee libros sobre evangelismo

Aquí hay dos libros antiguos y uno más nuevo: Tell the Truth [Di la verdad], por Will Metzger; El evangelismo y la soberanía de Dios, por J. I. Packer; y El evangelio y la evangelización personal, por Mark Dever. Incluye en tu mentalidad el deseo de ser instruido e inspirado por lo que otros han escrito sobre el evangelismo personal.

X. Ora por valentía

Es notable que la mayoría de las oraciones relacionadas con el evangelismo en el Nuevo Testamento se relacionan con oraciones por los que anuncian el evangelio, no por los que escuchan el evangelio (2 Ts. 3:1; Col. 4:3; Ef. 6:18-19).

Es notable y alentador que el apóstol Pablo sintió la necesidad de pedir a las iglesias que oraran por su audacia. Si Pablo necesitaba esas oraciones, ¿cuánto más la necesitamos tú y yo?


Este artículo es una adaptación, hecha por Misael Susaña de: John Piper. Finally Alive [¡Más vivo que nunca!], pp. 181-188.

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Misael Susaña

Misael Susaña nació en República Dominicana, fue salvado a la edad de trece años y actualmente es uno de los pastores de Iglesia Fundamento Bíblico. Es también maestro de Inglés. Estudió Teología Sistemática en la Academia de la Gracia (Reformed Baptist Seminary) y ha participado en varios diplomados. Desde el 2008, ha publicado regularmente artículos bíblicos en su blog (gustadaDios.com). Misael, teniendo en mente Salmos 34:8, prefiere describirse a sí mismo como un «Catador de la bondad de Dios y feliz promotor de ésta; para Su gloria y el beneficio [en Él] del creyente».

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