Recordemos lo que la doctrina de la trinidad plantea: «Hay un solo Dios en esencia, el cual subsiste eternamente en tres personas: El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo«. Ahora veamos dos aplicaciones:
CONSIDERA LA UNIDAD DE DIOS EN TODAS SUS OBRAS
Cada persona de la Trinidad (el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo) siempre ha actuado en coordinación, concierto, en cada una de Sus obras; es decir, no ha habido voluntades opuestas. Como el Padre (Gn. 1:1), el Hijo (Gn. 1:3; cf. Jn. 1:1-3) y el Espíritu Santo (Gn. 1:2) trabajaron en perfecta unidad en la creación del mundo para Su gloria y el bien de los Suyos, así también trabajan en perfecta unidad en la salvación del hombre. El Padre escoge desde antes de la fundación del mundo (Ef. 1:4), el Hijo redime, a los que el Padre escogió, a través de Su muerte en la cruz (1 P. 2:24) y el Espíritu Santo obra en el corazón de ellos para que reciban la salvación (Jn. 3:5). John Owen lo dijo de la siguiente manera: “El amor, gracia y sabiduría del Padre la planeó; el amor, gracia y humildad del Hijo la compró; y el amor, gracia y poder del Espíritu Santo capacitó a los pecadores para creerla y recibirla”.
NO CONFUNDAS LAS PERSONAS DE LA TRINIDAD
Esto es un error en el cual muchos caen, especialmente a la hora de orar. No fue El Padre quien murió por nosotros en la cruz, ni la persona del Espíritu Santo; El Hijo, Jesucristo, lo hizo. También, aunque en cierto sentido podríamos decir que Jesucristo es nuestro padre (Is. 9:6; Heb. 2:13), la Biblia ampliamente habla del Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo como nuestro Padre, quien nos adoptó como hijos (Jn. 1:12,13).
¿En qué sentido el Padre y el Hijo habitan en nosotros según Juan 14:23? En el sentido de que el Espíritu Santo, quien procede eternamente del Padre y del Hijo, mora en nosotros (Jn. 14:17).
Ora al Padre (Mt. 6:9), con la ayuda del Espíritu Santo (Ro. 8:26) y en el nombre de Jesús (1 Ti. 2:5) –sin confundir las personas de la trinidad.
Gracias por compartir estas hermosas enseñanzas que son de grande bendicion y ayuda. pues no lo sabemos ni entendemos todo, y esto es para edificación y crecimiento. Muchas bendiciones Dios siga dándoles sabiduría amados.