Persona escribiendo

Más dulce que la miel, mejor que el oro.

Predicador: John Piper.
Pasaje bíblico: Salmos 19:7-11

¿Cómo se puede permanecer vivo y no muerto? ¿Cómo se puede permanecer sabio y no necio? ¿Y cómo se puede permanecer feliz en Dios y no miserable? Respuesta: Meditando en la ley del Señor día y noche (Salmo 1:1-3).

Debido a que las Escrituras son la Palabra del Señor, la comunicación y revelación del Dios viviente, tienen efectos en nosotros que son mejores que los efectos de cualquier otra cosa que podamos leer, estudiar, ver o escuchar.

Las Escrituras son Palabra del Dios

Esto se desprende claramente de la repetición de David que hace seis veces. Versículo 7: “ley de Jehová”, “testimonio de Jehová”. Versículo 8: “mandamientos de Jehová”, “el precepto de Jehová”. Versículo 9: “El temor de Jehová”, “juicios de Jehová”.

Seis veces utiliza la frase “de Jehová”, es decir, de Yahvé, el Señor, el Dios que dice: “Yo soy el que soy” y no hay otro. El Dios que creó todo lo que es y lo mantiene en existencia. El Dios que conoce todas las cosas que han sido y que serán, y que entiende perfectamente cómo funciona todo en el universo, desde las galaxias hasta la energía subatómica. Este Dios ha hablado por medio de la ley, de testimonios, de preceptos, de mandamientos y de ordenanzas.

Los periódicos, las revistas, las novelas, los libros de texto, los libros de psicología o teología, la televisión, la radio, etc.. Nada de eso puede tener en nosotros los buenos efectos que tienen las Escrituras, porque esas cosas son la palabra del hombre, pero las Escrituras son la Palabra de Dios.

Los buenos efectos de meditar en la Palabra de Dios

Primero, David dice en el versículo 10 que las palabras de Dios son “deseables más que el oro, y más que mucho oro afinado”. Y, luego, al final del versículo 11: “En guardarlos hay grande galardón”.

Si tienes que elegir entre la Palabra de Dios y el oro, elige la Palabra de Dios. Si tienes que elegir entre la Palabra de Dios y mucho oro, elige la Palabra de Dios. Si tienes que elegir entre la Palabra de Dios y mucho oro afinado, elige la Palabra de Dios. Los beneficios de conocer y obedecer la Palabra de Dios son mayores que todo lo que el dinero puede comprar.

Los beneficios específicos de la Palabra de Dios

El beneficio de la vida

Es lo primero que menciona David, porque es la base de todo lo demás. Versículo 7: “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma”. Otra buena traducción sería: “que restaura la vida”. La vida no existe o está en peligro, y la ley del Señor la trae de vuelta.

No se puede mantener una vida dinámica, poderosa y vibrante en Dios si se descuida la Palabra de Dios, porque “la ley del Señor es perfecta, que restaura el alma”.

El beneficio de la sabiduría

Vemos esto en la segunda mitad del versículo 7: “El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo”; y en la segunda mitad del versículo 8: “El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos”.

La sabiduría es una vida que tiene sentido a la luz de la realidad. Y la luz de la realidad brilla desde la Biblia, no desde el mundo que ignora a Dios.

El beneficio del gozo

La Palabra de Dios es la mejor fuente de gozo más profundo y duradero. Esto se manifiesta en dos lugares. Versículo 8: “Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón”. Versículo 10 al final: “[Las ordenanzas del Señor son] más dulces que la miel y que la que destila del panal”.

La Palabra de Dios alegra el corazón y tiene un efecto en nuestras vidas que se compara con comer la cosa más agradable que David pudo imaginar: miel fresca directamente del panal.


Estas anotaciones fueron tomadas del sermón titulado Sweeter than Honey, Better than Gold [Más dulce que la miel, mejor que el oro], predicado por el pastor John Piper. Traducción de Misael Susaña.

Publicado por

Avatar de Desconocido

Misael Susaña

Misael Susaña nació en República Dominicana, fue salvado a la edad de trece años y actualmente es uno de los pastores de Iglesia Fundamento Bíblico. Es también maestro de Inglés. Estudió Teología Sistemática en la Academia de la Gracia (Reformed Baptist Seminary) y ha participado en varios diplomados. Desde el 2008, ha publicado regularmente artículos bíblicos en su blog (gustadaDios.com). Misael, teniendo en mente Salmos 34:8, prefiere describirse a sí mismo como un «Catador de la bondad de Dios y feliz promotor de ésta; para Su gloria y el beneficio [en Él] del creyente».

Deja un comentario