Haz estas preguntas al consumir libros, películas y música “no-cristianas”.

Ya hemos respondido a si es lícito para un cristiano consumir libros, películas y música “no-cristianas”, es decir, materiales cuyos autores no son cristianos ni tuvieron la intención de glorificar a Dios. Ahora vamos a ver una serie de preguntas que debemos hacernos al consumir esa clase de material.

Por la gracia común de Dios, aun después de la caída de la humanidad en el pecado, todo hombre es portador –aunque de forma distorsionada– de la imagen y semejanza de Dios, gracias a la cual se puede reflejar ciertas características de Dios. Teniendo eso en cuenta, hacemos las siguientes preguntas:

  • ¿Se muestra la belleza de la creación de Dios?
  • ¿Están sus verdades de acuerdo a la Palabra de Dios?
  • ¿Se dan lecciones morales valiosas?
  • ¿Se proveen buenas ilustraciones de verdades espirituales?

Que un libro, una película o una canción relate algún pecado no la convierte necesariamente en una mala producción. La Biblia relata actos pecaminosos. Pero lo que la Biblia nunca hace es aprobar el pecado. Por esa razón hacemos las siguientes preguntas:

  • ¿Es la santidad mostrada como despreciable? 
  • ¿Es el pecado tolerado como normal y promovido como si fuera una virtud? 
  • ¿Se busca entretener con el pecado y que éste se celebre?
  • ¿Se muestran las consecuencias negativas del pecado?

Te invito a comentar qué otras preguntas son importantes hacer.

¿Qué hacer con canciones y libros de autores cuestionables?

En estos dos últimos meses, los cristianos hemos sido sacudidos por dos impactantes noticias: Primero, en julio, un ex-pastor, defensor de la pureza sexual y escritor de un éxito de librería sobre las relaciones románticas, anunció que se divorciaba de su esposa y que ya no era cristiano. Segundo, en agosto, un cantante y compositor, para una de las bandas de adoración más populares alrededor del mundo, anunció que estaba genuinamente perdiendo su fe y que eso no le molestaba.

Como cristianos, ¿qué deberíamos hacer con las canciones y los libros de estos autores –y de otros como ellos–? ¿Deberíamos amontonar todo en una pila y quemarlo en una hoguera? No necesariamente.

EL PRINCIPIO

En Mateo 23, Jesús acusa fuertemente a los escribas y fariseos al llamarlos “hipócritas” (v. 13) y “guías de ciegos” (v. 16). Pero al inicio del capítulo, Jesús les dice a Sus discípulos: “Los escribas y los fariseos se han sentado en la cátedra de Moisés. De modo que haced y observad todo lo que os digan; pero no hagáis conforme a sus obras, porque ellos dicen y no hacen” (vv. 2, 3). Los escribas y fariseos eran los encargados de enseñar la ley al pueblo de Dios. Y en este versículo vemos que en vez de quitarle esa autoridad a los escribas y fariseos, Jesús la reafirma al decir que se haga todo lo que ellos digan –obviamente que esté de acuerdo a la ley (vv. 4ss)–. En sentido general, el problema de los escribas y fariseos no era en la doctrina, sino en su conducta. Por eso Jesús dice que no hagan como ellos, que dicen y no hacen. Jesús dice: “hagan lo que ellos dicen, pero no lo que ellos hacen”.

¿ES VERDAD?

Del mismo modo, no aprobamos y nos entristecemos por las decisiones que estos autores han tomado; pero tenemos la libertad para consumir lo que ellos han producido, sea escuchando sus canciones o leyendo sus libros, siempre y cuando estos estén de acuerdo a Palabra de Dios. ¿Crees que eso es imposible? Vuelve a leer las palabras de Jesús en Mateo 23:2 y 3. El quid del asunto aquí es: ¿Está lo que dice esta canción o este libro acorde con la revelación de Dios en la Biblia? Si es así, debemos ver a Dios como el autor último de esta verdad (véanse Juan 14:6; 17:17).

Jesús dijo que no hay verdad en Satanás y que él es mentiroso (Juan 8:44). Juan Calvino dijo: “Toda verdad viene de Dios; y consecuentemente, si hombres impíos han dicho algo que es verdadero y justo, no debemos rechazarlo; porque ésta ha venido de Dios”. Y otro autor más contemporáneo dijo: “La verdad es verdad sin importar si viene de la boca de una burra, un filósofo o del mismo apóstol [Pablo]… Dios posee la verdad y tienen un monopolio de la verdad”.

¿Es lícito para un cristiano consumir libros, películas y música “no-cristianas”? [II]

En el artículo anterior vimos que es lícito para un cristiano consumir libros, películas y música “no-cristianas” en donde podamos ver reflejos de la imagen de Dios en el hombre (como cuando se dice verdad). ¿Quiere decir eso que es lícito consumir absolutamente todo libro, película o música sin excepción? No. Nótese que dije: “… en donde podamos ver reflejos de la imagen de Dios en el hombre (como cuando se dice verdad)”. Y es una cosmovisión bíblica la que nos permitirá ver los reflejos de la imagen de Dios en el hombre o identificar la verdad.

En este artículo me gustaría ser más específico al decir cuáles son los libros, películas y música que no debemos consumir o que no debemos volver a consumir. Pero antes de llegar allí, debemos saber que porque un libro, una película o una canción relate el pecado no significa que debe ser evitado necesariamente. Si eso fuera así, entonces tendríamos que evitar muchas historias y escenas de pecado que se relatan en la Biblia. La pregunta más importante no es “¿Se relata algún pecado?”, sino “¿Se presenta el pecado como lo que es –pecado–?” y “¿Cómo se responde ante el pecado?”.

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¿Es lícito para un cristiano consumir libros, películas y música “no-cristianas”? [I]

Ojo

Cuando Dios creó al hombre (varón y hembra), Él lo hizo «a [Su] imagen, conforme a [Su] semejanza» (Gén. 1:26). Eso significa que el hombre reflejaría ciertos atributos de Dios y así le daría gloria. El hombre tendría la capacidad de pensar, de ser creativo, de comunicarse, de sentir, de actuar, de tener autoridad sobre la creación hasta cierto punto, de hacer lo que es moralmente bueno.

Con la entrada del pecado al mundo (Génesis 3) la imagen de Dios en el hombre fue afectada de tal manera que fue distorsionada; pero no fue afectada hasta tal punto de ser eliminada completamente (véase Génesis 9:6). Aunque el hombre es malo y no puede ganarse la salvación por sus obras, no es menos cierto que Dios no ha dejado al hombre ser tan malo como pudiera ser y en éste todavía podemos ver reflejos de la imagen de Dios –aun si no es cristiano–. Sigue leyendo ¿Es lícito para un cristiano consumir libros, películas y música “no-cristianas”? [I]