Razón #7: Porque la presencia de Jesús está de una manera especial donde la iglesia se reúne.
“Porque donde están dos o tres reunidos en Mi nombre, allí estoy Yo en medio de ellos” (Mateo 18:20).
Este versículo está conectado al versículo anterior que dice que si dos cristianos en la tierra se ponen de acuerdo y oran, Dios contestará su oración desde los cielos. Dios contestará las oraciones que sean de acuerdo a Su voluntad. No podemos decir que tenemos la autorización de Jesús (en Su nombre) si no estamos dentro de Su voluntad revelada en la Biblia. ¿Y por qué Dios contestará su oración? Porque Su Hijo está con ellos. Es como acercarse al presidente para hacerle una petición, con el hijo del presidente al lado.
Este pasaje se encuentra dentro del contexto de la disciplina eclesiástica. Jesús está diciendo que tanto Él como Su Padre celestial están de acuerdo con la disciplina en la iglesia que se lleva a cabo de acuerdo a Sus directrices. Una vez dicho eso, consideremos el versículo brevemente:
Fíjense, en primer lugar, que no se habla de una multitud. Según MacArthur: “la tradición judía requería de al menos diez hombres (una minyan) para construir una sinagoga o incluso sostener un culto público de oración. Aquí, Cristo, promete estar presente en medio incluso de un pequeño grupo”.
Y eso es de mucho estímulo hoy en día cuando muchos han puesto mucho énfasis en el número de miembros de una iglesia local. No es necesario que la membresía sea de miles de personas para que sea considerada como “iglesia” a los ojos de Dios y para que Jesús esté en ella.
En segundo lugar, fíjense que no se habla de individuos aislados, sino que se habla de personas –aun cuando son pocas– congregadas. Ciertamente Jesús está en todo lugar y eso incluye que Él está con cada cristiano que está en casa. Pero Él promete aquí estar de una manera especial cuando los cristianos están congregados, en un lugar, en Su nombre.
Sigue leyendo 7 razones para volver a congregarte [VII]