1. COMPRENDE EL EVANGELIO
Hace 2000 años, el cielo vino a la tierra en la persona del Rey Jesús y el futuro irrumpió en el presente en el reino que Él inauguró. Y durante 33 años, Jesús caminó sobre la tierra y vivió en perfecta obediencia a Su padre. Él vivió la vida que todos fallamos en vivir. Y luego fue a la cruz, y murió la muerte que nosotros merecíamos morir. En la cruz fue tratado como si hubiera vivido nuestra vida pecaminosa, para que por la fe pudiéramos ser tratados como si hubiéramos vivido Su vida perfecta.
Después de morir como sustituto en lugar de los pecadores, tres días después, resucitó triunfante de entre los muertos; para que todos los que se aparten de su rebelión y confíen en Él y lo atesoren, un día resuciten junto con él en novedad de vida resucitada en una tierra resucitada.
2. CONOCE TU CONTEXTO
Para compartir tu fe de manera efectiva, debes conocer a tu audiencia.
“Dios te ama” es una gran noticia, pero no tiene sentido si no entiendes quién es Dios. “Eres un pecador” es cierto, pero no tendrá sentido a menos que primero se entienda lo que es el pecado. “Necesitas un Salvador” es la mejor noticia de todas –no solo que necesitas uno, sino que se te ofrece uno–, pero eso no va a resonar si no entiendes de qué necesitas ser salvado.
El objetivo de estudiar ciertas culturas, valores, esperanzas, miedos e ídolos no es estar a la moda. No es para hacer que el mensaje sea “cool”. Es para que el mensaje sea claro.
Sigue leyendo 7 cosas que hacer antes de compartir tu fe.